Benidorm cierra la última semana de agosto con un 51% de ocupación en hoteles, un 28% en apartamentos turísticos y un 79% de ocupación en campings.
La previsión hotelera para la semana 36, que da comienzo al mes de septiembre, se sitúa en un 29%, haciendo más que visible el descenso de ocupación que se espera a corto plazo. Una caída provocada por la escasez de turismo internacional, la pérdida del turismo familiar por el inicio del curso escolar y el final de la temporada estival.
Sin embargo, a pesar del verano atípico vivido durante este 2020 el sector hotelero de la capital de la Costa Blanca logra un 55% de ocupación durante el mes de agosto. Imponiéndose como protagonista el mercado nacional que alcanza una cuota mensual del 84%.
En las diferentes zonas analizadas de la Comunitat Valenciana el mercado nacional ha sido el «salvador» en una temporada estival atípica y llena de incertidumbre. Siendo los destinos menos dependientes del turismo internacional los mejor parados en materia de ocupación.
El perfil de turista más común han sido familias y el propio turismo interno de la Comunidad, optando principalmente por estancias de fin de semana.
Septiembre comienza según lo esperado con previsiones a la baja en las diferentes zonas, viéndose especialmente afectado por el comienzo del curso escolar, el final del verano y la ausencia del turismo internacional.